Leaks:
Un niño tabú nace cuando la sangre de los Meigi y otra tribu se cruzan. Sin
embargo, la probabilidad de que su sangre Meigi despierte no es muy alta. Y aun
así, ¿por qué crees que ha despertado ahora en Asato?
Konoe:
Eso es porque tu …
Leaks:
Te equivocas. Fue por tu culpa, Konoe.
Su
voz aguda condenó a Konoe.
Leaks:
Es como he dicho. La reacción de la oscuridad con la oscuridad. Eres tú quien
ha sacado el mal de ese gato.
Leaks:
¿Creías que podrías superar esto si sólo lo conmovieras con cariño? Este es el
lamentable estado en el que se encuentra ahora. Todo es tu culpa.
Konoe:
….
Las
palabras resonaron en su mente y le atravesaron el pecho una por una.
Ciertamente... pensó que podría superar esto.
No
cedería ante algo como las palabras de Leaks; quería luchar contra él y abrir
un nuevo camino.
¿Hubiera
sido mejor estar separado de Asato? Sin esas ilusiones...
Si
se hubiera separado de Asato, ¿no habría sucedido nada de esto?
Leaks:
Y ahora, ese no tiene recuerdos de cuando era un gato. Con el cuerpo y la mente
invadidos por la oscuridad, ha quedado reducido a un monstruo espantoso.
Leaks:
Naturalmente, él tampoco sabe quién eres. Quién eres o qué tan apegado estaba
él contigo...
Leaks
soltó una risita, satisfecho consigo mismo.
El
rugido de Asato resonó tristemente en las orejas de Konoe. Dejando atrás por
completo emociones violentas como la ira, Konoe cedió ante la sensación de que
su fuerza abandonaba su cuerpo. ¿No podría volver a ser normal? ¿Era demasiado
tarde? En ese caso …
OPCIONES:
1.
No rendirse
2. Se
acabo.
Elegir
la primera opción.
No
aún no. Esto aún no había terminado. Él estaba... todavía vivo. Él no se
rendiría hasta el final. ¿No fue eso lo que le había dicho a Asato?
Konoe
se enderezó desde su posición agachada y miró fijamente al cambiado Asato a
través de la pared translúcida.
Si...
incluso si me transformo en algo feo.
¿Me
dejarías estar a tu lado? ¿Me dejarías estar a tu lado?
Las
palabras que Asato le había pedido giraban en el fondo de su mente. ¿Cómo
respondió en aquel entonces?
Que
quería estar a su lado. Él lo había prometido.
Konoe:
Déjame ver a Asato.
Leaks:
¿Oh?
Konoe:
Aun no me he rendido.
Leaks:
¿Incluso cuando te enfrentas a una bestia sin sentido?
Konoe:
No importa como se vea, él sigue siendo Asato.
Incómodo,
pero sencillo. Debido a que estaba dispuesto a arriesgar su vida por Konoe, no
había duda de que fue el gato negro quien había golpeado tan fuerte sus
sentimientos.
Leas:
Jejejeje, de acuerdo.
Mientras
Leaks se rió entre dientes como si lo encontrara extremadamente divertido,
borró su presencia del interior de Konoe.
En
ese momento, una ráfaga de viento sopló violentamente.
Konoe:
Ngh …
Al
igual que la malvada melodía que rugía, el atronador sonido del viento sacudió
a Konoe.
El
espacio cubierto de blanco desapareció, y cuando abrió los ojos, la colosal
fortaleza del árbol se reflejó en su campo de visión. ¿Habían regresado?
Ante
él estaba Leaks; luciendo una sonrisa. Pero Asato no estaba allí.
Leaks:
Está atrás.
Leaks
señaló con la barbilla detrás de Konoe.
Konoe:
¡!
Justo
cuando se dio la vuelta, un viento fuerte como una espada cruzó el costado de
Konoe. Lo esquivó, saltando hacia atrás de inmediato. Pero al momento
siguiente, quedó petrificado.
Era
como un alma condensada en la oscuridad. Su respiración ronca, turbia y salvaje
llegó a los oídos de Konoe. Un cuerpo enorme que duplicaba el tamaño de Konoe
se sacudió ruidosamente. Tenía garras y colmillos muy curvados que sobresalían
de sus grandes y desgarradas fauces, goteando saliva.
Una
figura bestial cubierta de pelaje negro como la de un lobo.
¿Era
Asato?
Estaba
aterrorizado. Por un instante, su mente se quedó en blanco. Cuando volvió a
mirarlo, la abrumadora intensidad congeló todo su cuerpo. Esos ojos brillantes,
llenos de una feroz sed de sangre, se apoderaron directamente de Konoe.
Él
era la presa.
Un
rugido sacudió el viento. Asato levantó su brazo una vez más, y un golpe de sus
afiladas garras cayó sobre Konoe.
Konoe:
¡Ngh!
Apenas
logrando mover su rígido cuerpo, Konoe esquivó por poco el ataque. A pesar de
que el viento apenas lo rozaba, le dolía la mejilla.
Esta
vez, el otro brazo atacó. Mientras esquivaba sus brazos, Konoe retrocedió. Pero
no pudo esquivar uno de los golpes de Asato y le golpeó el hombro.
Konoe:
¡Uaaagggh!
Impulsado,
Konoe se desplomó, deslizándose por el suelo con un fuerte impulso. Frunció el
ceño ante el dolor sordo que le atravesaba el hombro. Sin embargo, este no era
momento para quejarse. Inmediatamente se levantó con ambos brazos y se dio la
vuelta para poder ponerse de pie nuevamente.
El
lugar donde había caído Konoe fue arrancado por garras afiladas.
Konoe:
Uhg …
Ante
la abrumadora demostración de fuerza y velocidad, Konoe sucumbió a una
irritación desesperada. Sería malo si no contraatacara. Sin embargo, el que
estaba en la forma de la bestia... era Asato.
¿Qué
debería hacer?
Leaks
miró con una sonrisa de satisfacción.
Asato:
Grrrr ….
Asato
emitió un gruñido bajo y miró a Konoe con una sed de sangre aún mayor.
Su
gran cuerpo negro cargó de nuevo. Konoe saltó hacia atrás, pero en un abrir y
cerrar de ojos, le agarraron los brazos sobre el pecho.
Las
garras de Asato se elevaron sobre su cabeza, apuntando a su pecho.
No
pudo esquivarlo esta vez... las puntas de aquellas afiladas y curvas garras
estaban a punto de perforarle el pecho.
De
repente, algo emitió una luz fantástica.
Konoe:
Uh …
Debido
a su increíble resplandor, Konoe incluso se olvidó del terror que se avecinaba
y cerró los ojos con fuerza.
El
fragante aroma de las flores rozó suavemente la punta de su nariz.
Desconcertado, Konoe obligó a sus ojos a abrirse ligeramente.
Una
especie de fragmentos blancos relucientes se reflejaban en su estrecho campo de
visión. No, no eran fragmentos. Eran pétalos de flores. Como los que había
recibido de Asato antes en ese jardín de flores. Había secado un trozo de ese
ramo y lo llevaba en el bolsillo del pecho.
Los
pétalos de las flores finalmente desaparecieron como si se fusionaran en el
aire y, al mismo tiempo, la luz se apagó.
Sin
entender lo que acababa de suceder, Konoe volvió la vista hacia adelante con
total asombro. La bestia negra estaba allí. Sin embargo, esos ojos... eran los
ojos azules de Asato.
No
eran los ojos de una bestia sin sentido. Esos ojos ciertamente observaron a
Konoe.
Asato
…. Mientras Konoe intentaba llamarlo, un calor abrasador recorrió su brazo
derecho.
Konoe:
¡¡Ugh!!
Luego
del calor, sintió un intenso dolor que le puso la piel de gallina; su cola se
erizó cuando inmediatamente saltó hacia atrás.
Pero
debido a la reverberación del impacto, su fuerza se desvaneció y cayó al suelo
de rodillas. Hubo un zumbido agudo en sus oídos. Cada vez palidecía más.
Respirando con dificultad, Konoe volvió la mirada hacia su brazo derecho.
Estaba
empapado de un rojo sorprendentemente desbordante. ¿Había sido desgarrado por
las garras de Asato?
La
piel estaba desgarrada. Pero eso no fue todo. No había sensación debajo de su
codo. A pesar de ser su propio brazo, no haría lo que él quería.
¿El
dolor excesivo había adormecido sus sentidos? Con estos pensamientos, miró más
detenidamente su brazo derecho... y jadeó.
Su
brazo había sido destrozado. Probablemente el hueso estaba roto. Su carne y
piel apenas estaban conectadas.
Konoe
se sorprendió de lo tranquilo que estaba. La condición de su brazo era
ciertamente impactante, pero no era algo por lo que perderse.
Probablemente
esto se debió a que no creía que tuviera tiempo para eso ahora.
Miró
a Asato y buscó desesperadamente lo que había detectado hace algún tiempo.
¿Pero era esto una alucinación, una ilusión de su propio deseo? No había
ninguna luz de razón en esos ojos vacíos.
Konoe:
Nug …
Un
pulso poderosamente palpitante latía desde el interior de su brazo derecho,
como si su corazón estuviera allí.
Konoe
fue torturado por tal dolor que se preguntó si sus nervios estaban al
descubierto y dejó escapar un grito al sentir dolor en su brazo. Tratando de
detenerlo, presionó su mano izquierda sobre la herida que rebosaba sangre.
Su
cuerpo y su ropa se empaparon constantemente de rojo y goteó hasta el suelo.
Asato
soltó un gruñido y volvió a fijar su mirada en Konoe. Incluso cuando intentaba
no concentrarse en ello, su conciencia siempre volvía al dolor de su brazo
derecho.
Apretando
los dientes, Konoe miró desesperadamente a Asato.
Leaks: ¿Qué
pasa? No te has rendido todavía, ¿verdad? Parece que a Asato le gustaría jugar
contigo un poco más.
Leaks
se burló con una risa reprimida.
La
sed de sangre de Asato se desbordó de nuevo, y al momento siguiente, cuando se
dobló en una postura baja, se abalanzó sobre Konoe con su forma feroz con un
rugido.
Konoe
intentó retirarse, pero mientras reuniera fuerzas en su cuerpo, un fuerte dolor
recorrió su brazo derecho.
Konoe:
Kuh …
Se
tambaleó. Su respiración se volvió frenética. No pudo escapar. Las largas y
afiladas garras de Asato descendieron desde que se escuchó en ese mismo
momento.
Esta
vez, Konoe se preparó para lo peor y cerró los ojos.
Sin
embargo, no hubo ni el impacto ni el dolor que había anticipado. En cambio, lo
que vino fue un sonido alto y claro que reverberó fuertemente en el aire tenso.
Konoe
sintió un escalofrío y lentamente abrió los ojos.
Lo
primero que se reflejó en su campo de visión fue una lanza grande y
transparente. Atravesó el suelo y dividió a Konoe y Asato. El frío emitido por
esa lanza le hizo saber a Konoe que estaba hecha de hielo.
Asato
giró su cabeza en dirección a la puerta y su garganta retumbó como si estuviera
irritada.
De
pie allí, con la puerta abierta de par en par detrás de él ...
De
pie allí, con la puerta abierta detrás de él... estaba el Demonio del Dolor,
Kaltz.
Konoe
dudaba de sus propios ojos.
Leaks:
¿Nuestro artista estrella hace acto de presencia?
Leaks
le lanzó una mirada a Kaltz y las comisuras de su boca se alzaron.
Kaltz: ….
Kaltz
entró en el espacio de la fortaleza en silencio y miró a Asato. El ceño de
Kaltz se frunció dolorosamente cuando vio su apariencia transformada.
Al
observar esta mirada, Konoe de repente se dio cuenta de algo. Anteriormente,
Kaltz a veces miraba a Asato. Tenía la misma mirada en sus ojos en aquel
entonces.
No
era hostilidad... parecía nostalgia preocupada. Era como la mirada de un padre
cuidando a su hijo.
Kaltz:
……
Recordó
los recuerdos de Asato. La gata, la madre de Asato, y luego... Kaltz en forma
de gato.
¿Podría
ser …? Desconcertado, Konoe se volvió hacia Kaltz.
Asato
cambió su objetivo de Konoe a Kaltz y lanzó un rugido desde lo más profundo de
su estómago, preparándose para atacar. Su brazo largo y grueso cortó el viento
con un rugido atronador y una velocidad aterradora.
Kaltz
inmediatamente levantó su brazo y formó una pared de hielo que atrapó los
brazos de Asato. Un sonido áspero resonó y una grieta recorrió la pared de
hielo.
Kaltz:
Kuh …
Kaltz
apretó los dientes y levantó el otro brazo.
Piedras
puntiagudas de hielo volaron hacia Asato desde su palma abierta en grandes
cantidades. Sin embargo, el cuerpo de Asato simplemente los repelió y las
puntas de las piedras rotas se estrellaron contra el suelo y se hicieron
añicos.
Asato
gritó con un rugido violento y, con el escudo de la pared de hielo
derrumbándose, sus brazos se balancearon poderosamente hacia abajo.
Kaltz:
¡!
El
escudo de la pared de hielo se rompió en pequeños pedazos y Kaltz salió volando
junto con los fragmentos de hielo. Su cuerpo chocó contra el suelo justo al
lado de donde estaba Konoe y se desplomó.
Konoe:
¡Kaltz!
Soportando
el dolor de su brazo derecho, Konoe se agachó y miró a Kaltz.
Kaltz:
Ngh … cof … cof …
Kaltz
tosió dolorosamente y lentamente se sentó con el ceño fruncido. Su ropa estaba
rasgada desde el pecho hasta el estómago, la tela se volvió oscura y húmeda.
Había sido golpeado por las garras de Asato. Un hilo rojo goteaba en un hilo
desde los bordes de su boca.
Konoe:
¿Por qué tu …?
Kaltz:
……
Kaltz
luego miró a Konoe con ojos distantes, tristes y gentiles.
Desde
allí, su mirada se dirigió a Asato. La garganta de Asato retumbó con una
desbordante sed de sangre. Cuando Kaltz frunció el ceño, una leve sonrisa se
formó en sus labios.
Kaltz:
Es realmente doloroso, ¿verdad?
El
enorme cuerpo de Asato se contrajo. Konoe tuvo la sensación de que el aire a su
alrededor cambiaba ligeramente.
Kaltz:
Siempre te he traído dolor. Ya no quiero que te sientas triste. No puedo
permitir que lastimes lo que es más importante para ti. Esto es… lo mínimo que
puedo hacer, como tu padre.
Como
tu padre. En aquel entonces, el gato macho que apareció en los recuerdos de
Asato realmente era Kaltz. El padre de Asato. Konoe quedó asombrado por esta
verdad revelada.
Pero
Kaltz es un demonio. ¿Por qué …?
Las
preguntas que surgían dentro de su cabeza se perdieron ante el rugido de Asato.
Asato bramó con un gruñido notablemente bajo y sacudió fuertemente su cuerpo.
Esos ojos, brillando con sed de sangre, se apoderaron directamente de Kaltz.
No.
Por un instante, la luz de la razón habitó en los ojos de esa bestia.
Una
luz triste y lamentante.
Asato
se levantó del suelo y cargó hacia adelante. El viento aullaba, sus brazos
levantados sobre su cabeza, apuntando a Kaltz nuevamente.
Kaltz:
¡Gag … ug!
Konoe:
¡Kaltz!
Las
garras de Asato se clavaron profundamente en el pecho de Kaltz y enviaron su
cuerpo atrapado a volar. Patinando por el suelo, Kaltz yacía débilmente en el
suelo. Konoe soportó el dolor de su brazo derecho y arrastró sus pies hacia Kaltz.
Kaltz
respiró profundamente con dolor, su rostro hizo una mueca mientras tosía
violentamente. Estaba escupiendo un poco de sangre. Su ropa desde el pecho
hasta el estómago ya estaba empapada en rojo oscuro.
Pase
lo que pase, tuvo tiempo de escapar. Sin embargo, Konoe creía que Kaltz tomó el
ataque de Asato a propósito.
Konoe:
¿Por qué …?
Kaltz:
Escucha. Kagari esta bien … Por favor, dile a Asato.
Konoe:
Pero tu …
Kaltz:
Esta bien. Así está bien.
Murmurando
con una voz débilmente susurrante, Kaltz cerró los ojos cuando sus fuerzas lo
abandonaron.
Leaks:
¿Es eso lo que llaman amor paternal? Pero llegó demasiado tarde.
Leaks:
Si tienes algún error del que arrepentirse, para empezar, es el error de crear
a Asato.
Konoe:
……
Konoe
sintió tanta ira que ni siquiera podía hablar. Miró a Leaks con todas sus
fuerzas.
Konoe:
Te equivocas. No tienes derecho a decidir esas cosas. Nadie tiene... ese tipo
de derecho.
Leaks:
Es la verdad.
Konoe:
¡No!
Al
mismo tiempo que Konoe gritaba, Asato ladraba. Cuando miró hacia atrás, vio a
Asato mirando a Leaks con los ojos hirviendo de rabia y sed de sangre, sus
hombros subiendo y bajando con su respiración salvaje. No a Konoe ... a Leaks.
Leaks:
¿Oh? Parece que su locura desesperada y sacrificial no fue inútil después de
todo.
Leaks
entrecerró los ojos y habló con frialdad, y Asato dejó escapar un rugido
violento. El rugido hizo que Konoe se congelara y su pecho se apretara.
Muchas
sensaciones golpearon su piel a través del aire como pulsos eléctricos. Aunque
había perdido la razón, la hostilidad de Asato ciertamente estaba dirigida a
Leaks.
¿No
fue esta la oportunidad perfecta? Konoe de repente pensó esto. No sabía cuándo
el bestial Asato lo volvería a tomar como su objetivo. Pero entonces, lo había
ahora. Las emociones de Kaltz... ¿le habían llegado?
TRADUCCIÓN
AL ESPAÑOL POR: SAKURADA DI
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